Siempre te he querido. No hay sensación mas sincera que esa y no existe otro verbo que no sea el querer tenerte. Sonreír. Abrazarte y sentir que todo estaba bien. No me notaba segura si no tocaba tu pelo. Y no quería irme de ti, Y no quería que te fueras. Quisiera volver a sentir tus brazos, que seas mi almohada y, como solías hacer, perder tus dedos por mi piel. No recuerdo como era tener que ponerme de puntillas para besarte, Tampoco recuerdo tu respuesta, Pero recuerdo el soñar bonito cuando te tenía a mi lado y ahora nadie me ayuda a dormir. El evocar de tu sonrisa me hace llover.